¿Qué sabe y hace la gente feliz?
Ser feliz es una decisión que se toma y que se trabaja, se entrena y es una actitud a la que se atiende.
En primer lugar recordemos que ser feliz no es un don, es una actitud. Ser feliz es una decisión que se toma y que se trabaja, se entrena y es una actitud a la que se atiende. Si hemos decidido que queremos entrenarnos en tener una actitud feliz, porque es bueno para nuestra salud, es interesante que comencemos a realizar algunas acciones previas para saber cómo hacemos en nuestra vida.
Para ser feliz hay que poner intención, ganas y acción. Hacer los ejercicios que la ciencia propone para subir nuestro nivel base de felicidad, aprender cómo salir de los bajones y del bucle cuando vienen. Esto se puede aprender si le ponemos la misma paciencia, ganas y persistencia que ponemos cuando aprendemos algún nuevo deporte. ¡Entrénate en ser feliz!!
Empecemos por algún lugar que nos lleve a ser felices y compremos un cuaderno al que llamaremos Agenda de Vida feliz. En ese cuaderno vamos a poner los siguientes apartados y las siguientes cuestiones (es importante discernir entre lo que podemos cambiar y aquello que es necesario aceptar):
1- Saber dónde tenemos el foco de atención puesto:
Una de las cosas más importantes para nuestra felicidad es saber dónde ponemos nuestra atención. Según la ciencia, la felicidad es una elección, una decisión. Y tenemos un gran poder. En cada momento podemos elegir dónde poner nuestra atención: ¿En lo positivo o en lo negativo? Hasta podemos elegir nuestros pensamientos y manejar a nuestro favor nuestras emociones. Cuando elegimos asumir la responsabilidad de nuestra vida, algo mágico pasa.
2- Atendemos a nuestra salud y la conexión cuerpo-mente como principal autocuidado aceptando las circunstancias que tengamos y que no podemos cambiar. Ponemos soluciones a lo que se pueda modificar. La gente feliz atiende su salud y aprecian el valor de su cuerpo como el lugar que habitamos y nos lleva en esta vida.
3- Atendemos a los hábitos de vida: Dormir adecuadamente, descansar, alimentación, nutrición, hidratación, madrugar, meditar, organizar el día, desarrollar esos objetivos personales y agradecer y recordar momentos mágicos del día. Los hábitos de vida están directamente relacionados con nuestra felicidad.
4- Atendemos a nuestras relaciones, si son de calidad, superficiales, profundas, si suman, si restan, si nos hacen ser mejores personas, si nos contaminan, si nos hacen crecer, si nos quitan la energía, si nos inspiran si nos hacen pasar un rato agradable…Hay que tener en cuenta que hay una influencia muy grande de las personas que nos rodean sobre nuestra forma de ver la vida, de actuar y de pensar. Y es importante atenderte y ver si es tu lugar o decidir conscientemente dónde quieres estar. La gente feliz busca relaciones sanas, de corazón, sinceras, que le llenen, relaciones que suman y van orientadas a hacernos mejores personas.
5- Atendemos a la comunicación de emociones y pensamientos: El tipo de lenguaje que usamos, cómo decimos las cosas, cómo nos hablamos a nosotros mismos, qué tipo de cosas expresamos… La gente Feliz apuesta por una comunicación saludable y sabe que el bien se hace más grande cuanto más se comunica.
6- Atendemos al miedo y al fracaso, y lo cambiamos por valentía. Una cosa que muchas veces impide nuestra felicidad es el miedo al fracaso. Dejamos de hacer cosas para no sentir el dolor del fracaso. Sin darnos cuenta no vemos que el fracaso es necesario en el camino a nuestros metas, pero hay que saber cómo lidiar con él porque si no aprendes a fallar, no aprendes. La gente feliz sabe que los errores son experiencias y nos enseñan y nos muestran con más claridad el camino.
7- Atendemos a nuestras metas y objetivos. La mejor manera de lograrlos es escribirlos y luego actuar disfrutando del camino. Es más importante tener metas y perseguirlas con disfrute que el logro en sí. La felicidad está en estar en el presente y disfrutar del camino. Para ponernos metas que nos motivan tenemos que reflexionar y examinar nuestros valores.
8- Atendemos al tiempo que tenemos y cómo lo usamos. Cuidar nuestro tiempo como algo valioso y saber que el valor del tiempo es un tesoro. Atendemos qué queremos hacer con nuestro tiempo, cómo nos lo queremos dedicar, a quién se lo queremos regalar, y con quién lo queremos compartir.
9-Atendemos a un ocio saludable, que nos encante y nos haga disfrutar. Atender a nuestro disfrute, a nuestra expansión… Esto relajará nuestro cuerpo y nos ayudará para otros momentos donde vivamos la contracción. El carácter “disfrutón” ayuda mucho al ser humano, lo mantiene vivo, abierto, con ganas de vivir. La gente feliz apuesta por disfrutar, apuesta por vivir la vida, por entregarse, disfrutar y crecer.
10- Atendemos a nuestra autoestima. La autoestima es la base de todo, influye en nuestras relaciones, en nuestro trabajo y en nuestra vida general. Tener una saludable autoestima tiene innumerables beneficios. Aprendemos por qué es tan importante, cómo cultivarla, cómo mejorarla. La gente feliz ha aprendido a quererse, a valorarse, y a ser objetiva, la gente feliz ha aprendido a ser amable con ella misma, y ha aprendido a aceptarse y a reírse de cómo son. Se han convertido en sus propios cómplices y se cuidan, se tratan bien, son sus mejores amigos y se quieren.
La gente feliz es realista y sabe discernir y ajustar las velas del barco cuando es necesario, o navegar cuando es el momento. Apuesta por una actitud positiva con realista. La gente feliz cree en sí misma, creen que pueden lograrlo y siempre quieren aprender más.
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