7 Claves imprescindibles para cultivar la armonía en familia
La armonía familiar es algo que todos los padres deseamos y con el día a día nos entrenamos para ello, lo buscamos, pedimos ayuda en ocasiones a profesionales y otras veces lo anhelamos como si fuera un imposible. Esta también pasa por estados aparentemente en desequilibrio que, en realidad, forman parte del proceso.
Uno sabe que su hogar está en armonía cuando tiene esa tranquilidad de confianza y aparente seguridad en el ‘control’ de la situación. También lo sabe cuando comprende lo que puede suceder un ‘mal’ día, y no por eso no tenemos una familia ‘armónica’.
Pautas para poder cultivar armonía en el hogar
1. El ejemplo, nuestra mayor virtud
Es importante saber la fórmula de ‘Padres Felices = Hijos Felices’. Hablamos de la felicidad real, de la cultivada, de la permanente, de la que hace que, a pesar de las circunstancias, siempre miremos hacia delante y crezcamos con las situaciones. De esa que contiene el agradecimiento como actitud, la misma que permite disfrutar de las cosas, vivir en presente, y mirar al futuro para poder proyectar propósitos de vida. Si los padres optamos por esta fórmula, nuestros hijos entrarán en ella.
2. Cuidado y amabilidad
Es primordial tener una vida plena y amable con uno mismo, que permita educar y atender desde la abundancia y desde la cual sentirse cómodos. La amabilidad nos llena y hace mucho para la nutrición familiar.
3. Respeto en familia
Se deben evitar las discusiones de pareja delante de los niños, pero sí propicia charlar y discrepar de manera asertiva, esto hará entender que se puede opinar diferente y expresarse, pero también escuchar e integrar la opinión de otros, algo vital para ser feliz. Si la pareja se respeta, se coordina, se divierte, se admiran, se quiere y se cuida, esto hará muchísimo para favorecer la armonía familiar.
4. La madurez como bandera
Si los padres son conscientes de que ellos son los adultos y que ambos deben dedicarse a la crianza, educación y cuidado de los hijos, y además entienden que es saludable buscar espacios para la propia pareja pero teniendo en cuenta que hay personas que dependen de ellos, estarán apoyando mucho la armonía familiar. Estos entenderán lo importante que es buscar espacios de reconexión para los dos, a la vez que comprenderán y sabrán encontrar el momento adecuado entendiendo con amor las circunstancias de la paternidad.
5. Dedicación y límites
Es muy importante saber que “los niños que crecen con límites son más felices, y serán adultos más adaptados y con capacidad para afrontar adversidades”. La clave de los mismos está en saber cómo ponerlos, cuándo, en qué momentos y conocer también cómo explicarlos.
Es necesario, tanto para ellos como para los adultos, saber dónde se encuentra el límite de las cosas, conocer las actuaciones que esperamos de ellos (que estudien, que coman, duerman o pidan algo manera adaptad) y las consecuencias que tendrán en su día a día las acciones que realicen. Proponer un marco claro en casa de normas que sean equilibradas y adaptadas a cada momento es adecuado para favorecer la regulación conductual de nuestros hijos. Esto favorecerá mucho la armonía familiar.
También resulta muy nutritivo ofrecer tiempo de calidad y presencia por nuestra parte para propiciar la sintonía y la conexión con los niños.
6. La importancia de expresar y de escuchar
Los niños desde muy pequeños comprenden a sus padres. Puede que un bebé no lo haga a nivel lingüístico pero sí entiende de tonos, de sensaciones que le producen aquellos que le llegan, de momentos en los que hay dedicación para que le hablen y le expliquen.
Es muy importante que nos demos, y también les dediquemos a ellos, ese tiempo para explicarles lo que sucede o lo que sentimos, que estamos cansados, que nos vamos a trabajar, o nos vamos de viaje, o que lo que estaban haciendo no está bien, así como lo especiales que son para nosotros, lo que los queremos y todo lo que nos gusta de ellos.
También es fundamental valorar la comunicación como un aspecto esencial en la inteligencia emocional y el éxito del ser humano. Al igual que es vital pararnos y escuchar, observarlos y verlos en todo su ser. Muchas veces nuestros hijos nos quieren decir cosas de otra manera que no es la verbal y es necesario que como padres estemos disponibles y presentes para atenderlos con calidad.
7. Reforzar y valorar sus aptitudes y actitudes
Se debe aceptar y reconocer quiénes somos, con nuestras aptitudes y nuestras dificultades. Resulta muy valioso para la educación que nos refuercen el valor de la actitud como pilar de vida para desarrollar lo que deseamos: ser felices y vivir en armonía.